Una buena nutrición le proporcionará a tu mascota una vida larga, sana y feliz. Actualmente existen múltiples alternativas y opiniones sobre la alimentación de nuestros perros y gatos, y a veces poca o mala información sobre cuál de ellas es la mejor para nuestra mascota. Intentaremos aportar algo de luz para ayudarte a tomar una buena decisión.
La composición de las dietas
Cuando compramos un envase lo primero que vemos es el análisis de su composición, con el porcentaje de hidratos de carbono, proteínas, grasas, vitaminas y minerales. Y el origen de esta composición, tanto animal como vegetal. Pero lo más importante es el porcentaje de cada ingrediente en el análisis. No tienen igual valor biológico las proteínas de origen vegetal que de origen animal. Y también es fundamental el procesamiento y la digestibilidad. No es igual la proteína de soja que la animal, ni las harinas de carne o pescado que el producto fresco.
Todo esto tiene su primer reflejo en el precio del producto, y en la consistencia y volumen de las defecaciones; pero lo más grave son las consecuencias a largo plazo que no sea una nutrición equilibrada, completa y con buena digestibilidad y alto valor biológico. Consecuencias que muchas veces no son apreciables y que comúnmente no las relacionamos con la dieta.
Dietas Comerciales
Las dietas comerciales, tanto secas (pienso) como húmedas (latas), incluyen ingredientes de origen animal y vegetal que buscan aportar una dieta completa, digestible y equilibrada y, que con distintos procesos de producción y envasado, permitan su conservación y comercialización. Estas dietas incluyen distintos aditivos artificiales: conservantes, para evitar la oxidación y el crecimiento de microorganismo, colorantes que aporten un mejor aspecto, y saborizantes que aumenten su palatabilidad.
Existen también en el mercado dietas naturales, sin aditivos artificiales. Los colorantes y saborizantes son fáciles de evitar o sustituir, pero los conservantes naturales son menos efectivos por lo que es más difícil mantener controlados los procesos de oxidación y crecimiento microbiano. Entre estas dietas naturales está muy extendida la dieta barf, con alimentos crudos, basada en proteína animal y suplementada con verduras, fruta, huevos, prebióticos, probióticos y complementos. La carne que se utiliza debe ser apta para el consumo humano, ya que es la única aprobada y certificada por un medico veterinario en la plantas de faenamiento.
Además, no se le debe adicionar huesos en la dieta, ya que podría producir lesiones del tracto digestivo e impactación; y otros problemas graves para la salud de la mascota. El argumento de que comer huesos es similar a la alimentación que tienen durante miles de años los cánidos salvajes no es del todo cierta. Estos comen preferentemente la carne y vísceras de sus presas, dejando los huesos a los carroñeros.
Dietas vegetarianas
Las dietas vegetarianas no son recomendables ya que son difíciles de mantener bien equilibradas y pueden producir diferentes problemas en la salud de su mascota; y son totalmente inadecuadas en gatos. Estos son carnívoros estrictos, y numerosos estudios confirman que no aportan el mínimo de nutrientes necesario.
Los gatos no tiene premolares y molares, adecuados para la molienda de los vegetales; y carecen de amilasa salival, enzima que comienza la digestión inicial del almidón vegetal. Su aparato digestivo es el de un carnívoro, con un estómago más simple y un intestino más corto que el del perro, preparado para una dieta de proteínas y grasas y baja en hidratos de carbono, con unos niveles bajos de enzimas y mínima amilasa pancreática para la digestión de estos. Con esto, una dieta vegetal, rica en carbohidratos, hace que estos, al no ser correctamente digeridos, alteren la flora gastrointestinal, afectando a la digestibilidad de las proteínas.
Las necesidades proteicas del gato son 2-3 veces mayores que las del perro, y usan la grasa y la proteína como principal fuente de energía; y no pueden regular el metabolismo y utilización de las proteínas dependiendo de su aporte en la dieta. Además, una dieta alta en proteínas aumenta el metabolismo del gato y la sensación de saciedad, previniendo la obesidad.
Los gatos no pueden producir algunos aminoácidos, componentes de las proteínas y escasos en las de origen vegetal; y precisan mayor aporte de estos en la dieta. Estos son la taurina, solo presente en proteínas animales, y cuya deficiencia produce ceguera, cardiomiopatía dilatada, abortos y deficiencias inmunológicas. La arginina, que si no es suficiente causa alteraciones inmunes, vómitos, tetania y coma. La metionina y cisteína, que si no es suficiente aparecen dermatitis, mal pelaje y retrasos del crecimiento. La tirosina, cuya falta acarrea depigmentación e insuficiencia renal.
Pide consejo
Su veterinario es el especialista adecuado para asesorarle sobre cuáles son las mejores opciones para alimentar a su mascota en las distintas etapas de su vida y en las distintas patologías que pueda sufrir.
La buena nutrición de su mascota le proporcionara una vida larga, sana y feliz. Y para ello recomendamos alimentos alto en proteína animal para su mascota y que sea idealmente libre de grano y baja en carbohidratos,
En nuestra tienda puede encontrar el alimento de marca N&D del laboratorio italiano Farmina el cual es libre de grano y alto en proteína animal especialmente formulado para su correcta nutrición.
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